viernes, 22 de enero de 2016


El lenguaje no verbal revela todo aquello que no expresamos con palabras. Inconscientemente nuestro cuerpo aporta información sobre nuestras intenciones, sentimientos y personalidad.

Incluso cuando estamos quietos o en silencio, los gestos, las posturas, las expresiones faciales y la apariencia hablan por nosotros.

El lenguaje corporal cuenta quiénes somos, cómo nos sentimos o cuáles son nuestros gustos.


"Solo hay una oportunidad para una primera impresión"


¿Es importante nuestra imagen en nuestro día a día? ¿crees que no? Pongamos un ejemplo...Enfrentarnos a una entrevista de trabajo, un acto social, una comida de ocio... ¿te vestirías en cada ocasión de la misma manera?

La forma de vestir supone una forma de comunicación con el mundo: si descuidamos nuestra forma de vestir estamos transmitiendo que no nos importa demasiado lo que opinen de nosotros. Por el contrario, si somos extremadamente detallistas podemos comunicar una obsesión por lo que piensen otras personas. Lo mismo sucede si tenemos una forma de vestir muy individualizada e incluso excéntrica lo que demuestra un rasgo de personalidad. El caso es que nos guste o no, ayuda a que se formen las primeras impresiones.






Se han realizado estudios que han demostrado que determinados colores, accesorios o texturas pueden modificar nuestra forma de percibirnos, nuestro estado de ánimo y con ello nuestra forma de expresarnos.

De acuerdo con un estudio de la Universidad de Hertfordshire se preguntó a más de 100 mujeres cuál era la prenda que llevaban cuando estaban deprimidas siendo los vaqueros y una camisa las más elegidas. En cambio cuando estaban felices había un 10% de posibilidades de usar su vestido favorito y el uso de los complementos como collares y pulseras aumentaba exponencialmente.

“La ropa que nos ponemos es capaz de alterar la manera en la que interaccionamos con el resto del mundo porque determina el modo en el que nos ven los demás de la misma manera que condiciona lo que pensamos de nosotros mismos” Dr. Galinsky


Quizás ahora debas reflexionar sobre la ropa con la que mejor te sientes.